por Una de las soluciones más prácticas para vestir ventanas, ventanales y puertas es colocar cortinas enrollables. Este tipo de cortinas mejoran la regulación de la luz y, al mismo tiempo, aumentan la privacidad, siendo además una solución de lo más fresca y decorativa.
Las cortinas enrollables tienen un sistema de funcionamiento muy simple, ya que cuentan con una cadeneta lateral que sirve para subir y bajar el estor y que, en algunos modelos, también sirve para controlar la posición de las tablillas, mejorando la entrada de luz.
Pero: ¿Cómo de difícil es colocar cortinas enrollables? En realidad, se trata de un proceso muy sencillo en el que solo se invierten 10 minutos y para el que solo se necesita un taladro.
Cómo colocar cortinas enrollables fácilmente
Las cortinas enrollables cuentan con un sistema de soporte incorporado al textil, este soporte incluye la cadeneta y un sistema de regulación, que es el que permite subir y bajar el textil.
El soporte se coloca en el techo o en la pared mediante unos tornillos, que se fijan con ayuda de un taladro. Es una operación muy rápida y sencilla, para la que no hace falta ser un experto manitas, sino solo tener unas nociones básicas sobre uso de taladro.
Un aspecto importante a la hora de colocar cortinas enrollables es que la cadena de regulación se puede colocar tanto al lado derecho como al lado izquierdo, lo que supone más posibilidades de personalización y adaptación al espacio. De esta forma, una vez insladado el estor enrollable, su manejo será más simple, y no habrá molestias.
Como ya se ha indicado con anterioridad, las cortinas enrollables se pueden colocar en la pared, sobre la ventana, pero también se pueden aplicar en el techo en caso de que la ventana o la puerta ocupe toda la pared. Colocarlas en el techo no reducirá sus funciones y, además, se conseguirá el mismo efecto decorativo.