El relleno nórdico es un complemento ideal para el descanso, la combinación de sus materiales aíslan el cuerpo del frío y de la humedad del exterior, y su ligereza te permite amoldarse a los movimientos que se producen durante el sueño.
Su asombroso poder calorífico es sorprendente si tenemos en cuenta lo poco que pesa.
Solo quien ha dormido alguna vez con un relleno nórdico es capaz de entender todas sus ventajas sobre los tradicionales sistemas de abrigo en la ropa de cama.
VENTAJAS DE NUESTROS RELLENOS NÓRDICOS
Es muy ligero, facilitando la movilidad y amoldándose al cuerpo.
Es 100% Natural, tanto su relleno (de plumas y plumones de ave) como su tejido 100% algodón.
Es transpirable y, a la vez, el mejor aislante contra el frío y la humedad. De este modo reduce al mínimo la sudoración.
Mantiene la temperatura corporal estable durante toda la noche.
Su calidad se mantiene en perfectas condiciones durante años con un sencillo mantenimiento.
Práctico a la hora de hacer la cama, pues no necesita sábanas, mantas o colchas, solo su funda nórdica.
El intercambio de las fundas nórdicas permite renovar la apariencia del dormitorio muy a menudo.
EL PESO Y EL GRAMAJE DEL RELLENO NÓRDICO
Cuanto menos pesa un nórdico. mayor es su calidad. Pero se ha de tener en cuenta a la hora de comparar que el gramaje del relleno nórdico se ajuste a la climatología de la casa y de la zona de la vivienda.
Hemos adaptado al clima ibérico la tradición escandinava en la confección de rellenos nórdicos, elaborando unos nórdicos adecuados a nuestras temperaturas.
Antes de utilizar un relleno nórdico, debemos extenderlo durante algún tiempo para que recupere su forma y volumen original, alcanzando su máximo poder calorífico.
PUREZA DEL RELLENO NÓRDICO
Todos nuestros nórdicos están rellenos de plumas y plumones vírgenes. Esto asegura un grado de calidad e higiene que las plumas y plumones reciclados no pueden ofrecer.
MANTENIMIENTO Y CONSERVACIÓN DEL NÓRDICO
Un relleno nórdico puede conservarse durante muchos años en perfectas condiciones con un sencillo mantenimiento.
Tres consejos:
Airear y sacudir, al menos una vez por semana, para que recupere su forma natural. Hay que evitar el sol directo, ya que puede dañar su calidad.
Guardar el relleno en su bolsa de tela (nunca en plástico) en lugar seco, aireado y sin luz, cuando no vaya a ser utilizado.
Dontextil.com recomienda la limpieza en seco del relleno nórdico, en un establecimiento especializado.