Un colchón es una importante inversión en salud y calidad de vida, y en algunos casos, el colchón puede suponer un desembolso económico importante, ¿no es una pena que se estropee antes de tiempo por manchas habituales.
En el momento de comprar un colchón nuevo y de colocarlo en la cama, merece la pena valorar las ventajas que ofrecen los protectores de colchón.
¿Por qué utilizar un protector del colchón?
Estas prendas textiles están fabricadas pensando en absorber la mayor parte de manchas habituales que se pueden producir durante el tiempo de sueño, como pueden ser de transpiración, sangre y orina, y se pueden lavar en la lavadora con la mayor comodidad y sencillez.
Los cubrecolchones tiene además una protección antiácaros, de modo que, se reducen los efectos de alergias durante el tiempo de sueño.
Muchos de estos protectores se pueden lavar a temperaturas que superan los 90ºC, de forma que se garantiza la eliminación no solo de las manchas, sino también de las bacterias que pueden proliferar en la prenda.
Si son de rizo americano, ademas, favorecen la transpirabilidad durante el sueño, garantizando el mayor confort mientras se duerme, pero evitando que se manche el colchón.
Si el colchón es una inversión en salud y bienestar, el protector de colchón es la garantía de que este se mantendrá en las mejores condiciones durante mucho más tiempo.